una experiencia acogedora y memorable, con dueños encantadores y una ubicación excelente, perfecta para disfrutar de la vibrante vida nocturna

La Pensión Portuguesa es un lugar especial, donde el calor humano se siente desde el primer momento. Los propietarios son amables y se aseguraron de que me sintiera como en casa. La limpieza es impecable, y el ambiente acogedor ayuda a olvidar las preocupaciones del día a día. Además, la ubicación es ideal, cerca de todo lo que necesitas para disfrutar de Porto al máximo. Sin duda, un lugar altamente recomendable.

una estancia cómoda y agradable

La ubicación del hotel es perfecta para explorar la ciudad y disfrutar de la vista. Además, tener servicio de té disponible en la recepción fue un detalle muy agradable. La limpieza de la habitación fue notable, lo que contribuyó a una experiencia confortable.

Sin embargo, el tamaño de la habitación era un poco más pequeño de lo que esperaba.

Recomendado para familias que buscan calidad

La ubicación era muy buena, cerca de una cafetería donde desayunábamos bien y había varios bares y restaurantes cerca. Además, el personal fue muy amable y atento, lo que hizo que nuestra estancia fuera más placentera.

No era barato, pero a pesar de eso, lo consideramos aceptable.

Todo perfecto, excelente ubicación para hacer turismo.

El ruido de la calle me impidió dormir y el ventilador solo servía de adorno. Además, esperaba un trato especial por el costo, pero claramente eso no sucede aquí. Y qué decir del olor en la habitación, que era simplemente inaguantable. Casi escribo una buena reseña, ¡pero no pude!

La Portuguesa Guest House tiene una ubicación perfecta en el centro de Oporto, ideal para explorar la ciudad. La habitación era muy limpia y cómoda, aunque el chorro de agua de la ducha era algo débil. En general, una buena experiencia.

vuelvo fijo

Me encantó la habitación, era amplia y super cómoda, con aire acondicionado, ducha privada y todo muy limpio. El equipo de limpieza excelente. Además, el personal era muy amable y nos ofrecieron té después del check out. Muy bien ubicado, a solo 10 minutos a pie del centro.

La ubicación es genial, a solo cinco minutos del transporte público. El personal es muy amable y nos permitieron dejar las maletas después del check-out. Las habitaciones estaban limpias y cómodas. Definitivamente recomiendo disfrutar de un café en un bar cercano, ¡una gran manera de pasar el tiempo con amigos!

Sin embargo, el ambiente nocturno puede ser un poco ruidoso, así que si eres sensible al ruido, lleva tapones para los oídos.

La ubicación es muy buena, a solo 10 minutos de todo. El lugar es acogedor, perfecto para mi familia. Además, detrás de la pensión hay una pastelería deliciosa que no pudimos dejar de visitar. Nos sentimos como en casa.

Mi mujer dice que sería ideal tener un área de juegos para los niños.

La habitación era súper cómoda y limpia. Además, el lugar está cerca de una excelente panadería que no puedes perderte.

me sentí especial, no he tenido ningún inconveniente

Vaya experiencia culinaria en Oporto! Disfruté de unos pescados fresquísimos en Porta Dezanove, ¡mamma mía! Además, Café Cristina tiene un bollo de chocolate que no puedes dejar pasar. La limpieza del lugar fue notable y el ambiente festivo de los bares cercanos llenó cada noche de alegría.

El check-in fue un poco caótico a la 1:30 am, tuve que esperar 20 minutos. Menos mal que una amable portuguesa me echó una mano, porque sin ella no sé cuánto tiempo habría pasado.

La habitación era cómoda, aunque había mucho ruido en la calle por las noches.

La estancia en la Portuguesa Guest House fue agradable en general. La ubicación es ideal, justo en el centro de Oporto, lo que facilita el acceso a los principales puntos turísticos. La habitación que tuve era limpia, con sábanas cambiadas cada dos días y un baño que cumplía con lo necesario. Sin embargo, noté que el ruido de la zona de copas cercana puede ser incómodo por las noches, así que llevar tapones para los oídos es recomendable. fue un problema que el acceso a las habitaciones era complicado, sobre todo si llevas equipaje pesado o si tienes dificultades de movilidad. Me costó un poco encontrar cómo abrir la puerta principal, especialmente en plena madrugada cuando el personal no estaba disponible. Aunque el trato del personal fue cordial, la falta de atención en momentos críticos afectó un poco la experiencia. En resumen, una buena relación calidad-precio, pero hay que tener en cuenta algunos detalles sobre el ruido y el acceso.

Fue una opción adecuada para una visita de paso en Oporto con una buena relación calidad-precio. Las personas que nos atendieron fueron muy amables y nos ofrecieron una pava eléctrica para calentar agua. No olvides preguntar por eso si necesitas un café por la mañana.